Punto  de contacto directo con la piel del paciente.

El frío o el calor transportan a través de tuberías aisladas termoaislantes que se fijan con tiras de velcro. Son suaves en cualquier condición y se pueden adaptar fácilmente a la parte del cuerpo a tratar.

Permiten una perfecta transferencia de calor y frío sobre la parte del cuerpo a tratar gracias a la forma anatómica que maximiza el contacto con la superficie corporal. El tejido de alta tecnología mantiene la flexibilidad y suavidad de la envoltura incluso cuando se usa a bajas temperaturas, como se aplica durante la etapa aguda, evitando quemaduras por el frío.

A través de las prendas es posible aplicar presión, alterna o continua, programable desde el panel de control para una función linfática importante. (No disponible en todos los dispositivos Zamar)